Swing... [Libre]

por **Lee Hyo Ri** Sáb Jun 29, 2013 9:02 pm

La madrugada estaba más fría que de costumbre. Aún el cielo estaba oscuro. Faltaban un par de horas para que amaneciera y las calles comenzaran a llenarse de mas gente. Por el momento, todo estaba tranquilo. Apenas y un par de personas se asomaban por los callejones caminando con cierta prisa. El frío, quizá... o temor de que alguien interrumpiese de manera no muy cordial su camino.

Un pequeño ruido le hizo girar la cabeza, observó la figura del desordenado payaso acomodarse en el montón de residuos de los diarios en una esquina que apenas y recibía un poco de luz.
Carraspeó ligeramente pasando la mano derecha por el negruzco cabello echándolo hacia atrás para que no estorbase su mirada. Con la izquierda, sacó un cigarrillo de las sucias pero elegantes vestimentas, llevándolo con lentitud hacia sus labios para encenderlo. Una gran cantidad de humo salio de sus labios. Suspiró apenas de manera audible y le dio un par de caladas mas al cigarrillo para luego tirarlo al suelo y pisarlo con los altos tacones.

Miró hacia donde el payaso estaba recostado y caminó con tranquilidad hacia él. Le movió las piernas con los tacones y se acomodó a su lado apoyándose en él.
Cerró los ojos por un instante, respirando lentamente. El silencio era abrazador y tranquilo. Volvió a abrir los ojos. Había ya un poco mas de luz.
Se sentía la humedad de las calles, el aire frío se sentía. Levantó la mirada para ver la constante máscara del payaso y llevó una mano a los anaranjados pelos de este acariciándolos.

- Es hora ya - le dijo en un murmuro levantándose dejando que el payaso le limpiase las ropas con las manos de goma.

Dejó que el payaso hiciese su trabajo mientras que ella caminaba unos pasos mas adquiriendo una imagen lamentable hasta incluso degradante. Lastima.
Se sentó con los pies descalzos en el frío suelo y con la cabeza gacha. Estiró apenas las temblorosas manos pidiendo limosna.

Unos pasos se escuchaban a lo lejos.

Comenzó a tararear una canción por lo bajo. La persona se detuvo en frente de ella. La miró con lastima y sacó una moneda de sus bolsillos. La dejó caer fríamente en sus manos para luego caminar un par de pasos mas dejándola atrás.
A oír que sus pasos se detuvieron, sonrió ligeramente levantándose del suelo y caminar silenciosamente hasta llegar a su espalda.
El payaso le hizo caer de rodillas y ella con cierta rapidez se acercó a su oído - una moneda... no es suficiente - Lamió su cuello riendo por lo bajo para finalmente morder la suave piel deleitándose con avidez.

Sintiendo como el cuerpo se tornaba más frío, lo suelta dejándolo caer en el suelo.
El payaso se encarga de acomodarlo en el rincón haciéndolo ver como si durmiese.
Se relame los labios y se acomoda las vestimentas. Su cabello se ve mas sedoso, y su imagen es elegante. Los finos y altos tacones adornan sus pies y un hermoso vestido delinea su femenina silueta.

Amaneció.

El payaso con las pulcras vestimentas le sigue el paso, como si una sombra fuese. Camina lejos del cuerpo mas un ruido le hace detener sus pasos. Ladea el rostro agudizando el oído y se gira a ver. ¿Quién es el intruso?